¿Cuántos son los que saben que Jesús de Nazaret no nació en Diciembre sino en primavera? ¿Y, que tampoco nació en Belén, ni en un pesebre?.
Estos hechos, los conocen perfectamente, y desde siempre, la Jerarquía de la Iglesia Católica de Roma. Entonces, ¿por qué hicieron creer al mundo occidental cristiano que el Maestro Jesús nació la noche del 24 de Diciembre? ¿Por qué la Jerarquía de la Iglesia Católica tampoco dice la verdad respecto a esto? ¡Sabemos la respuesta!
Jesús de Nazaret no nació ni el 24 de Diciembre, sino en primavera; ni en Belén, en Judea, sino en el corazón mismo de Galilea; y tampoco nació en un pesebre sino en un betsaid que estaba a unos pasos de un arroyo.
Un betsaid era un refugio construido y sostenido por los miembros de la Comunidad esenia, que ofrecía todo lo que un viajero podía necesitar. En el que nació Jesús estaba medio encastrado en la roca. También era un refugio para enfermos y necesitados, y para todos aquellos que no tenían adonde ir. Podían estar unas noches.
Tenía razón el anterior y máximo representante de la Iglesia Católica, el Papa Benedicto XVI cuando afirma en su libro "La infancia de Jesús" que en el portal de Belén no había ninguna mula ni ningún buey, no había animales. Esta afirmación de Benedicto XVI probablemente esté basada en las "imágenes del tiempo" que tuvo el privilegio de presenciar y que fueron captadas con el famoso y controvertido aparato llamado "cronovisor".
¡Ya se ha hablado de este aparato en su momento y, en realidad, ¡si existe!, aunque muy bien custodiado en las galerías secretas subterráneas del Vaticano!
Benedicto XVI tenía razón, no había ni bueyes ni asnos... En el betsaid donde nació el Avatar Jesús en los pesebres solo había cabras y ovejas dispersas por aquí y por allá, como en las colinas circundantes.
M. Z.
