Compartimos aquí, este maravilloso texto pedagógico y psicográfico de una gran maestra (y muy vinculada al Espíritu de María Magdalena), Marta Povo.

El fenómeno de la vida del Ser
Humano, y del resto de seres vivos, ha sido objeto de estudio y disertación
durante miles de años. Ha habido tendencias científicas, filosóficas y místicas
que han mostrado un amplio abanico de pensamientos respecto al mecanismo de la
Vida, sus orígenes y su evolución. Desde Pitágoras, Platón, y Aristóteles, hasta
Galileo, Newton, Maxwell, Einstein, Popper y todos los científicos y filósofos
actuales, una y otra vez se han preguntado (y han dado distintas respuestas) si
la vida es evolutiva o no. Se han generado grandes polémicas respecto a si
existe un 'origen' de la vida, un principio (lo cual implica un fin), o bien la
Vida si es eterna y lo ha sido siempre, lo cual implica permanente 'cambio',
implica proceso y transformación.
En mi obra 'Geometría y Luz, una Medicina
para el alma', se expone ampliamente una visión evolutiva, mostrando unos
estratos o niveles que el ser humano va integrando y superando. Esta visión la
doy a través del hilo conductor de los 'chakras', no vistos ya como núcleos
energéticos o acupunturales, sino como estadios evolutivos del alma, como
sustratos de la conciencia o plataformas vibratorias que van 'creciendo' o
modificándose conforme evoluciona nuestra sensibilidad y lucidez. Es algo así
como un largo proceso de maduración psicológica y espiritual, del cual doy
ahora una síntesis.
El proceso de cómo el ser humano (desde el primer hombre
primitivo, hasta el hombre actual) ha venido desarrollándose y madurando en
niveles de conciencia distintos, lo realizo mediante el lenguaje de la
psicología, del arte, de la técnica, de la Historia… y de todo lo que el ser
humano ha ido creando, aprendiendo e integrando como ser sensible e
inteligente.
No obstante, este material de estudio no debe verse como una
'clasificación' o una gradación comparativa de los hombres. Si un ser humano
está madurando e integrando su segundo nivel de conciencia (su chakra 2), no
por ello es 'inferior' a alguien que está madurando su chakra 3 o superiores.
Simplemente, ocurre que su conciencia no tiene aún todas las experiencias
necesarias que le conducirán a madurar su CH3, por tanto, él está aún
integrando su CH2 y… hasta que éste núcleo de conciencia no esté maduro,
completo e integrado, pues simplemente no podrá entrar de forma natural en la
dinámica consciente de su CH3.
Una comparación o clasificación despectiva respecto
a los niveles evolutivos de los individuos sería tan estúpida como decir que un
adolescente es 'inferior' a un individuo de treinta años, o que éste chico es
'menos evolucionado' que un hombre de sesenta años. Simplemente son estratos
distintos del desarrollo, su grado de madurez es aún precario (como es natural
en un niño, adolescente, joven) y sus experiencias no han sido aún
'suficientes' como para entrar en el siguiente grado evolutivo más adulto. El
individuo maduro que ahora está vibrando en su CH4, un día estuvo en su CH3 y,
antes, en su CH2 y en su CH1.
Durante toda esta síntesis evolutiva, también
es muy importante tener en cuenta que cada ser humano, esté en el nivel
evolutivo en que esté, todos sus niveles de conciencia se manifiestan ‘simultáneamente’.
Se manifiesta todo su bagaje energético/espiritual, aunque sea cierto que 'en
aquel momento' es uno de estos chakras el que está más presente, pues siempre
estamos en 'un punto' o estrato del largo proceso de maduración y desarrollo. Y
además, todos nosotros, desde que nacemos hasta que morimos, pasamos por cada
uno de estos grados de desarrollo. En la primera infancia estamos elaborando el
CH1, en la niñez y principio de la pubertad el CH2, en la plena pubertad y a lo
largo de toda la juventud elaboramos el CH3, en la madurez el CH4…
Todos los
chakras y niveles de conciencia ya adquiridos e integrados, están 'siempre'
vibrando de forma simultánea en cada uno de los seres humanos. Sin embargo,
esta visión resulta muy útil para 'reconocer donde estamos' ahora, cual es la
vibración más 'presente' en nuestra vida, qué pasos y experiencias deberíamos
observar, madurar e integrar, y cuáles son las vivencias, sentimientos y
habilidades que hemos ya madurado y trascendido, con lo cual ya no debemos darle
más vueltas. Ese 'tomar el pulso' a nuestro proceso evolutivo, terapéuticamente
es muy interesante. Vamos a describir ese interesante proceso natural.
* El
desarrollo del primer chakra o núcleo de conciencia vendría a ser el nivel
evolutivo elemental de las primeras sociedades primitivas, cuando comenzábamos
a desarrollar nuestro primer estadio de conciencia espiritual como 'seres
humanos'. Se trata de un nivel preconvencional, egocéntrico, instintivo,
automático e irreflexivo, en el que también se conectan, se desarrollan, se
activan y se expresan las glándulas gónadas del individuo. En realidad aquí el
ser humano dedica toda su energía a la satisfacción de las necesidades
biológicas, a la supervivencia, a las sensaciones instintivas, y lo hace de una
forma poco reflexiva, de una forma como automática.
Durante este primer período
de madurez, el hombre vive en clanes y su vida se fundamenta en ellos. Su
propia vida, el yo, no tiene apenas sentido sin su clan. El grupo, la manada,
la etnia… le proporciona seguridad, y en este nivel el individuo prioriza y
defiende siempre a su grupo. La cuestión de 'seguridad y defensa' es muy
importante en este estadio, pues es un nivel evolutivo marcado principalmente
por lo que podríamos llamar un egocentrismo étnico.
Este hombre vive de la
tierra o su contexto inmediato, busca y lucha por su propio sustento y se
alimenta instintivamente como el resto de animales. De hecho, ignora el
significado de 'futuro', o dicho de otro modo, ignora qué significa elaborar
planes, o almacenar algo para prever, para aprovisionar. Vive el presente como
lo hace un niño. El ser humano, en su primer estadio evolutivo, tiene aún una
escasa conciencia del ‘yo’, como ser distinto; se siente como un ser grupal,
siendo eso clasificado por algunos psicólogos como un tipo de 'narcisismo
primario'. Sus impulsos no se derivan de la mente consciente sino de sus
sentidos y sus instintos.
Es decir, empieza a ser un individuo 'consciente',
pero no sabe aún como serlo, porque no se observa aún a sí mismo, ya que su
fuerza, de hecho, pertenece a un clan, es un espíritu grupal aún
indiferenciado. Las principales finalidades de su vida son la comida, el
cobijo, el sexo y la seguridad. Este tipo de ser, sabe moverse ágilmente para
sobrevivir, sabe luchar para conseguir lo que quiere y tiene una visión aguda
para lo básico y lo necesario.
El individuo que está en pleno desarrollo de su
primer chakra, lucha por sobrevivir, por lo tanto… 'comienza a conocer sus
poderes’, que son distintos al de los animales, o sea, 'reconoce' su mente, su
poder, comienza a saber que puede ser autosuficiente, y utiliza sus sentidos
instintivos en opciones de vida cada vez más elaboradas. Este es realmente el
primer descubrimiento de ser 'un individuo con conciencia' y, por tanto, está
muy pendiente de sí mismo, de lo que siente, de lo que puede, y de lo que
consigue, y toda la transformación y experiencia que se deriva de esta primera
atención a su singularidad, es precisamente lo que le irá dando energía para
comenzar a desarrollar su 'segundo' nivel de conciencia y el CH2.
Pero, aún
en este primer estadio evolutivo, el 'yo' permanece identificado y fundido con
el mundo material, en un estado que podríamos llamar de in-diferenciación.
*
Cuando la humanidad fue avanzando y evolucionando, comenzó a desarrollar
facultades nuevas, a encontrar recursos (materiales e intelectuales), a ampliar
más y más su capacidad de creatividad e inventiva como individuo. El segundo
chakra siempre se ha considerado el centro de la vitalidad, de la creatividad,
la vitalidad, el poder y la defensa de la vida. Al crear tantas cosas nuevas,
el hombre tuvo que luchar por ellas, tuvo que defenderlas, diferenciarlas y
también compartirlas.
En esta etapa el individuo busca básicamente seguridad,
el encuentro de su poder y también la proyección de sí mismo. Dedica mucha
energía a la búsqueda y creación de nuevas cosas, a la imaginación y al
mantenimiento de lo que crea. El CH2 está en relación a nuestras glándulas
suprarrenales y su desarrollo, y también a la reserva y prevención de la
energía vital. Cuando se desarrolla esta segunda fase de conciencia el hombre
busca siempre la ‘unión’ a un grupo y necesita ser más sedentario. Nace por
primera vez 'la familia', el clan y la reunión social. Cuando vibraba tan solo
con su primer chakra, el hombre era mucho más nómada y no se anclaba en ningún
sitio concreto, vivía de forma tribal en cuevas temporalmente, vagaba y buscaba
de forma continuada nuevas posibilidades de subsistencia.
En este estadio
evolutivo el individuo obedece a la tradición social, a las costumbres
familiares y a los jefes del clan; se decir, comienza a 'jerarquizarse' como
una forma de establecer el orden. En la Historia, vemos este segundo nivel de
conciencia en el primer sedentarismo y la invención de la rueda… hasta el
Renacimiento del siglo XV o el florecimiento máximo de la creatividad humana.
Esta etapa renacentista fue el final del desarrollo del CH2, pero a la vez fue
la semilla y el comienzo de la expansión de nuestro tercer chakra.
Respecto a
esta larga etapa de varios siglos es importante recalcar que el individuo
desarrollara su CH2, su aspecto social y su gran potencial de creatividad como
ser humano. Eso fue espectacular como fenómeno de crecimiento (igual que en los
niños, que casi los vemos crecer semana a semana). Durante cientos de años, el
hombre, aunque en casi todos los casos la mujer (posiblemente debido al
sedentarismo que implicaba la gestación y la creación de un núcleo familiar y
del clan) creó, inventó y desarrolló nada menos que la Agricultura, la
Medicina, la Magia, pero también en esta época desarrolló su capacidad de crear
la Arquitectura, el Arte, el Comercio y todo lo que se deriva de estas grandes
materias que marcaron el curso, no solo de la humanidad, sino de la vida de la
Tierra como planeta, un Ser… también en evolución.
La sexualidad en esta etapa
fue más selectiva y ya con sentimientos (no solo con instintos como en el
primer estadio evolutivo). Esa fue la razón principal por la que el individuo
se distinguió del clan y comenzó a crear ‘su’ propia familia independiente y
diferenciada. Además, ‘defiende’ a la familia de los intrusos que puedan
destruirla. Como resultado, hay que decir que en este estadio el ego del ser
humano desarrolló y amplificó también su sentido de la posesión, los celos, los
apegos, las envidias, las manipulaciones y los temores, entre otras emociones
derivadas de este nivel consciente (y de la energía de seguridad y pertenencia
propias del CH2).
Entonces busca tener ‘más poder’ para sobrevivir y para
desarrollarse él mismo, o su familia o, en tercer lugar, para ampliar y dar
poder a su propio clan (ya sea étnico, lingüístico o territorial). A través de
la creatividad encuentra su poder personal, por lo tanto, desarrolla su propio
poder sobre el territorio y sobre la sociedad. Aquí es también cuando nace la
Política y la Economía más allá de la supervivencia, y comienza el intercambio
y la expansión territorial e internacional, es decir, nace el ‘poder
socioeconómico’ propiamente dicho.
Cuando empieza a amplificarse su segundo
estadio evolutivo de conciencia… el ser humano comienza a pensar en el futuro;
como todos nosotros cuando somos adolescentes. El hombre ‘proyecta’ su
conciencia. Por eso en épocas antiguas creó o ‘descubrió’ la agricultura y comenzó
a hacerse sedentario. Espera las cosechas (antes vivía al día y estaba a merced
de la naturaleza), crea y edifica espacios cerrados y seguros para defenderse
(arquitectura), experimenta con la naturaleza para curar sus heridas y sus
primeras enfermedades (medicina).
Así es como el hombre también descubre su
mente y sus capacidades perceptivas y creadoras. Crea, desarrolla y utiliza la
magia y ciertos rituales basados siempre en la naturaleza, con el único fin de
’obtener poder’ y conseguir la ‘protección’ de fuerzas mayores celestiales.
Pero también hace magia para experimentarse a sí mismo y seguir descubriendo el
poder de su propia mente, de su conciencia 'humana' y diferenciada de los
animales. De la magia nacieron luego la alquimia y parte de la medicina.
En
sociedades más avanzadas el hombre de este estadio creó y organizó la Religión
para mantener el poder sobre la familia y sobre el grupo. El individuo se va
sofisticando en sus manifestaciones y también crea, o re-crea… la Belleza, crea
la armonía de las formas y los colores a su alrededor, naciendo así la
artesanía y el arte, pues también inventa, crea y busca la perfección. Es
decir, cada vez es más consciente de que su persona puede ser creativa o
creadora, poderosa y generadora de 'nuevas realidades'.
En este segundo nivel
consciente el ser humano está completamente identificado con su emocionalidad,
en relación con los demás seres. La expansión del segundo nivel de conciencia
se desarrolla básicamente dentro de un clan basado en el matriarcado, pues de
hecho los patriarcados son más del CH3. El estadio del CH2 es también el
embrión de la manipulación, que más tarde se desarrollará de pleno en el tercer
nivel. Estas fueron a grandes rasgos las primeras sociedades etnocéntricas.
Lo
más interesante del CH2 es el descubrimiento de la gran capacidad que tenemos
los seres humanos de crear, de generar vida, de obtener salud, armonía,
belleza, comodidad, seguridad, unión. Todo ser 'consciente' posee una gran
sensibilidad y grandes capacidades creativas, perceptivas, es un ser que
empieza a descubrir su potencial divino, su individualidad y su 'libre
albedrío'… que fue en definitiva la semilla de su CH3 !. Pero aquel CH2
(llamado energéticamente ‘hara’ o ‘tantien’) fue, y sigue siendo aún, el centro
energético de la creatividad, la vitalidad, el poder, el enraizamiento con la
naturaleza, el núcleo del ‘asentamiento’ de sus emociones, y sobre todo, es el
principio de su libertad y su autonomía. Sin desarrollar estas cualidades del
CH2, un hombre o una mujer no puede comenzar a expandir equilibradamente el
plexo solar o su tercer nivel de consciencia.
* El tercer estadio evolutivo es
realmente 'el proceso de diferenciación', de individuación, de independencia y
de autosuficiencia. El tercer chakra es el encuentro de la libertad de Ser… y
el principio de la autonomía espiritual. El ser humano empieza a verse a sí
mismo, comienza a creer en él, a observar y a expandir su potencial genuino.
Durante el proceso de desarrollo anterior hubo un salto desde lo etnocéntrico y
grupal, hasta lo egocéntrico, pero ahora, en este CH 3 debe incrementar y
expandir sus vínculos con los demás hombres y mujeres (mas allá de lo
biológico) y por eso llega a elaborar creencias mentales y a establecer valores
culturales.
Revisando la Historia humana, las tribus aisladas y las hordas del
principio, finalmente se reúnen entorno a las primeras ciudades-estado; eso es
más propio del CH1. Se crearon imperios feudales y surgieron algunos
gobernantes fuertes y diferenciados; eso sería el estadio de CH2. A partir de
crear toda esa estructura humana y social, comienza el patriarcado. Es decir,
nace 'el líder'. Energéticamente, eso es realmente el CH3. Se trata del
nacimiento del 'yo', de la auto-realización y de la defensa del 'sí mismo', cosas
propias del tercer nivel de conciencia y del desarrollo egocéntrico.
En este
nivel de conciencia fue cuando nació la cultura y la ilustración, pero que
realmente nació fue… el ‘copyright’ (por expresarlo gráficamente). Se activó
el… yo sé hacer esto, yo soy el 'autor' de tal cosa, yo soy diferente y único,
yo valgo, yo soy digno… En la Historia fue cuando nació la técnica y la
ciencia. Es la época en la que irrumpió el gran comercio internacional y
sobretodo la competitividad. El hombre pasó a ser el centro del mundo y la
naturaleza pasó a un segundo plano.
Observamos como se desarrolló el tercer
nivel consciente a partir del Renacimiento; luego lo vemos en el Siglo de Oro
de las artes y las letras; más tarde apareció la gran revolución industrial, el
cientifismo y la democracia. Cada vez habían más lideres, más inventores, más
descubridores, cada vez había más 'nombres propios' (antes, durante el
desarrollo del CH1 y CH2, todo era más anónimo, y eso lo vemos sobretodo en el
arte) y empezaron a destacar más autores (literarios, artísticos, científicos,
políticos…), y sobresalían más 'individuos'.
Curiosamente, esta fue la época de
la abolición de la esclavitud por primera vez en la Historia, porque comenzó a
valorarse y a respetarse al hombre, al individuo, al Yo. También comenzamos a
hablar de 'derechos humanos'. Todo eso nace, en la conciencia humana, como
consecuencia de su propia búsqueda como individuo y del encuentro de su propio
poder espiritual. El hombre busca la divinidad en él, su singularidad y su
valor como Ser dimensional, dentro de un universo multidimensional.
* Aquí
comienza la vinculación libre entre individuos. Los hombres que ya han sido
‘diferenciados’ previamente (en su tercer estadio evolutivo), si realmente este
proceso de individuación ha sido completado, tan solo entonces, nacen los
vínculos personales laborales y sociales, realizados desde la libertad y desde
la compasión y la comprensión profunda del 'otro'. Cuando reconoces tu propia
singularidad, puedes reconocer la singularidad del otro, la peculiaridad de
todos y cada uno.
Durante el desarrollo del cuarto chakra o nivel consciente,
la energía se expande desde el 'yo y los míos', hacia el todos nosotros. Este
es el estadio en que el ser humano siente el Campo Unificado, y tiene la
conciencia de vivir dentro de una red de vida y un holograma humano/universal,
donde se percibe profunda y sinceramente que, cada parte, contiene el todo, y
que el todo, está en cada fragmento de vida. En el CH4 el ser humano se hace
consciente de la multi-responsabilidad, de la supervivencia del planeta, del
amor real, de la fraternidad amplia...
Cuando la conciencia humana supera el
aislamiento del grupo y encuentra sus afinidades con otros individuos maduros,
entonces puede trascender su modalidad etnocéntrica, egocéntrica y
convencional, para acceder de forma natural a una etapa multicéntrica, global y
post-convencional. Si el individuo no encuentra a personas en este mismo nivel
vibratorio, realiza su desarrollo del cuarto chakra en solitario, sencillamente
porque se reconoce, se ama y se respeta a sí mismo, y eso es irreversible,
además de satisfactorio. Esta es realmente la etapa evolutiva del ser humano en
la que comienza a vibrar la coherencia entre su ego y su espíritu. Este estadio
es el que produce más paz interna debido a esa sensación de amor, coherencia y
madurez vibratoria, en la que ya no entra ninguna clase de necesidad y
rivalidad, sino tan solo de complementariedad.
El CH4 está en relación directa
con la glándula timo, el centro del alma, el corazón (no como órgano, sino como
sede inteligente no racional). En este proceso natural de maduración del tercer
nivel, en transición hacia el cuarto, hay personas que están una vida entera
para hacer este paso; también puede realizarse en pocos años, pues el ritmo
evolutivo de cada individuo jamás es el mismo, ni es comparable. En parte, en
esta etapa, creo que el ritmo de cada uno obedece al buen asentamiento y
maduración de su propio Yo, es decir, depende de 'lo completo' que esté su
propio proceso anterior de individuación y auto-reconocimiento.
* Después del
desarrollo completo o parcial del cuarto núcleo energético, el Ser Humano
necesita ‘compartir ese conocimiento’, la amorosidad, la creatividad, su
comprensión y esa energía de fluidez energética. Necesita compartir su yo
maduro precisamente porque se hace consciente de la red de unión entre él, los
demás y todo lo existente. Y ese 'compartir' pasa necesariamente por la
comunicación, la característica conocida del quinto chakra de la garganta.
Como individuos y como sociedad, se nos empieza a desarrollar la necesidad de
expresión de nuestra realidad, pero sobretodo, se nos activa la capacidad de
‘dirección’ de esa energía de manifestación (dirección y enfoque de
pensamientos y sentimientos, y… de la calidad de ellos). Sin embargo, lo más
importante de este estadio evolutivo humano es que, cuando está en plena
madurez, nuestro CH 5 es el chakra de la 'verdad'.
Si revisamos la Historia
veremos que las sociedades primitivas eran bastante poco expresivas. Más
adelante, se van convirtiendo en seres que comienzan a comunicarse a través de
instintos, sensaciones, emociones, gestos, palabras, aunque pocas. En realidad
fue cuando nació el teatro, la danza, y muchas formas de expresión gestual y
corporal. Simultáneamente, en ese avance creativo y tecnológico del segundo
estadio evolutivo, vemos que aparecen varios ‘medios de comunicación’
geográficos, como carros, barcos, ferrocarriles, coches, aeronaves...
Pero ya
en la plenitud de su tercer chakra, el ser humano crea la imprenta, los
periódicos, la telefonía, la informática, los satélites, la red Internet, es
decir, los grandes medios de comunicación verbal, que además, cada vez son más
efectivos en la rapidez de transmisión de información. Sin embargo, en ninguna
de estas etapas se dio la 'comunicación mental' de forma masiva. Ahora debemos
saber lo que implica el desarrollo del quinto chakra de la comunicación. El
siguiente paso evolutivo en la consciencia humana es el desarrollo de la
telepatía. La facultad cognitiva de la telepatía no es de CH6, como se ha
dicho, sino de CH5, puesto que es el sumum de la comunicación.
Hasta ahora es
como si jugáramos a intentar desarrollar nuestro siguiente nivel de conciencia,
mientras vibramos a la vez en el CH4. Comunicarnos… ¿qué significa realmente?
Estar permanentemente unidos. Hoy, hasta los niños llevan el teléfono móvil en
el bolsillo, y ya todos podemos comunicarnos con todo el mundo al instante
mediante internet. Pero, comunicar nuestro ser, expresar tu divinidad y
unicidad, es algo más que el hablar, el teléfono y el ordenador.
Observando el
proceso, veremos que la palabra escrita se va substituyendo por la palabra
hablada, pero también se substituye por las imágenes conceptuales. Hoy en día,
la imagen es la base de los medios de comunicación. Estamos volviendo a 'la
imagen' como sistema de transmisión de pensamientos, es decir, volvemos al
'ideograma' (empleado especialmente en China), que puede definirse como la
concentración de varias ideas en una sola imagen. En la actualidad, el gran
fenómeno de la publicidad emplea también los ideogramas, los logotipos, los
códigos gráficos y multitud de imágenes que substituyen a varios conceptos. Así
pues el hombre vuelve a la Forma y al Cromatismo, al mundo de los Arquetipos, a
los mensajes encriptados, a la publicidad subliminal…
Cuando el hombre supere y
trascienda la tecnología, cuando desparezcan los cables y dejemos de inventar
más maquinas para comunicarnos, cuando cada individuo sutilice sus facultades
perceptivas y desarrolle más su hemisferio derecho, entonces comenzará a
transmitir lo que piensa y siente, a expandir todo su Ser, por la propia fuerza
de sus pensamientos y sus sentimientos. Pero para que eso ocurra, primero debe
saber ‘dirigir’ su fuerza mental, y eso es precisamente empezar a madurar el
CH5.
Lo más interesante es que, el quinto nivel de conciencia y el desarrollo
pleno de este quinto núcleo energético, es precisamente el estadio evolutivo de
la 'Verdad'. Eso es debido a que, desde esta conciencia elevada, desde esa
función de la telepatía… ‘no se puede manipular la información’.
Más allá de
los engaños, sabremos (por transmisión directa telepática) lo que hay detrás de
las palabras, detrás de la publicidad, detrás de los intentos de manipulación. Observemos:
la humanidad primero se reconoce a sí mismo como ser creador y peculiar (CH3),
luego ama y respeta profundamente, se ama a él y a todo su entorno (CH4), y
luego viene la Verdad, la transparencia y toda la ética natural que ese amor
puro implica.
Lo que uno siente y piensa… va a ser transmitido tal cual,
directamente, de forma sincera y transparente (si primero él ha aprendido a
‘enfocar’ su mente y su corazón, y luego ha aprendido a ‘expresar’ todo eso al
exterior). No importan las palabras y las imágenes que emplee uno, no importa
lo que nos quiera vender, pues… no será necesario ‘convencer’. Lo que importa
ahora es la 'intención', el propósito, su verdad interna. Lo que uno tenga
dentro de sí mismo… es exactamente lo que va a ser transmitido. Todos sus
conocimientos van a poder ser expresados y materializados por pura telepatía o
por la fuerza de la mente y el pensamiento.
Cuando el ser humano desarrolle su
quinto estadio de conciencia, se acabará el periodismo y la política, por
ejemplo. Tampoco será necesaria la 'escuela' tal como la concebimos hoy, ni
habrá esos programas intelectuales de aprendizaje. Ni existirán los libros. Tan
solo se darán sesiones silenciosas de transmisión directa de conocimientos
entre las personas desarrolladas y los alumnos en proceso de maduración. Las
formas de pedagogía, desde primaria hasta la universidad, cambiarán
radicalmente.
Tampoco las relaciones de amor y de trabajo no podrán ser falsas,
puesto que todo lo que uno piense y sienta en profundidad… va a ser transmitido
de forma automática. Se darán relaciones sinceras (consecuencia del desarrollo
del cuarto chakra y del amor puro…) y cuando este fenómeno energético avance,
se abolirá consecuentemente la manipulación, la falsedad, la hipocresía, las
apariencias, el camuflaje, el dominio… teniendo una calidad relacional con una
transparencia que jamás vivió el ser humano.
Aquí el ego del hombre se libera
de la personalidad artificial, de las máscaras creadas, y eso permite la
entrada de las grandes verdades del universo. En el desarrollo del CH5 ya no se
crea una personalidad para el trabajo, otra para los amigos, otra para la
pareja, otra para los hijos... Ni hace falta poner voz de 'barby' para
conquistar o agradar, ni hace falta el maquillaje ni ninguna clase de máscara.
La persona y el mundo exterior, fluyen conjuntamente al unísono, se comunican y
se interpenetran mutuamente. Cuando hablamos de Verdad y de Transparencia
significa que 'el dentro y el fuera' se ven mutuamente y, por tanto, se
comunican con total fluidez.
Estos periodos de evolución, estén más o menos
clasificados e investigados, son sabios, necesarios... pero, sobretodo, son
naturales, parecen formar parte del mismo mecanismo de la vida. El simple hecho
de ser 'consciente' de ese maravilloso proceso de evolución, de cada
exploración, cada etapa o cada paso que da nuestra conciencia, el hecho de
observarlos y de permitirlos, parece que facilita (y posiblemente impulsa) el
propio proceso de desarrollo humano y planetario, con las implicaciones espirituales
que ese desarrollo conlleva.
Que nuestra conciencia se desarrolle, que se
expanda, que aprenda, que descubra, que cree nuevas realidades, que madure, que
sea cada vez más luminosa o sabia… es lo más natural del mundo. Todo el
universo se expande. Nosotros también. Lo hacemos con él.
por MARTA POVO