/image%2F1488937%2F20221016%2Fob_97296d_poche-sang.jpg)
Los médicos de Alberta afirman que cada vez ven más pacientes o familiares de pacientes que no quieren aceptar una donación de sangre de una persona vacunada debido a la preocupación por las vacunas COVID-19, en particular las de ARN mensajero.
Alertan sobre el peligro que esto puede suponer para la vida de los pacientes que necesitan transfusiones de sangre.
Stephanie Cooper, obstetra especialista en los nacimientos de alto riesgo en Foothills Medical Centre de Calgary, relata que hace poco tuvo un problema con una paciente que se negó a consentir una transfusión de sangre si procedía de un donante que hubiera recibido la vacuna COVID-19.
Conmocionado, DrCooper compartió un tuit sobre el incidente. Su post recibió numerosas reacciones de profesionales de la salud que dijeron haberse encontrado con casos similares.
"Estoy muy preocupada por esto", dijo, señalando que Canadá no registra el estado de vacunación de los donantes.
Señala el peligro que supone esta resistencia: "No hay opción de recibir sangre negativa contra el COVID. Así que al rechazar la sangre, significa que morirás".
Los padres piden sangre a un donante no vacunado.
"A día de hoy, nos vemos una o dos veces al mes. Y la preocupación es, por supuesto, que estas solicitudes podrían aumentar", dijo, señalando que los padres están solicitando sangre de donantes no vacunados para sus hijos, en particular los que requieren trasplantes de médula ósea.
Hay que recordar que estos niños están inmunodeprimidos" y, por tanto, son bastante frágiles, advierte a los padres reticentes.
El Dr. Sidhu, que también es profesor asociado de la Facultad de Medicina Cumming de la Universidad de Calgary, señala que algunos adultos que han rechazado las transfusiones de sangre han sido tratados por otros medios. Pero lo realmente preocupante son las situaciones en las que la transfusión es vital", advierte.
Desinformación interiorizada.
Para Timothy Caulfield, titular de la Cátedra de Investigación de Derecho y Política Sanitaria de la Universidad de Alberta, "esto es un resultado directo de la propagación de informaciones erróneas.
Se basa en la idea de que, o bien la sangre está contaminada, o bien la sangre va a darles COVID-19. [... Así que básicamente han adoptado e interiorizado la desinformación asociada a las vacunas COVID-19", explica.
El servicio canadiense de sangre, que dispone de una sección especial en su sitio web dedicada a este tema, ha declarado que la salud de los pacientes es su máxima prioridad. Health Canada no ha recomendado ni impuesto ninguna restricción al uso de las vacunas COVID-19 aprobadas ni a la donación de sangre", dijo.
Con información de Jennifer Lee.
