¡Fijémonos en la cola del avión! ¿Por qué vemos nítidamente la aleta derecha de la cola del avión y apenas se aprecia la aleta izquierda? Si fuera un avión real y auténtico se vería nítidamente el avión completo. El ala izquierda del avión tampoco se aprecia la silueta claramente. ¡¡Un avión ni de esas características, ni siquiera un avión caza podría atravesar como si fuera mantequilla unos edificios como esos, las Torres Gemelas!! ¡Es materialmente imposible! ¡Es como tirar una lata de salchichas contra una rejilla de alcantarilla de hierro forjado y que la atraviese! ¡No olvidemos que el Ejército Norteamericano (sin nombrar otros países) posee tecnologías (algunas de ellas son alienígenas) que están cien años por delante de lo que se conoce oficialmente actualmente!
¡Sí, todo el mundo vio como unos aviones se estrellaban contra aquellos dos gigantescos rascacielos de la ciudad de Nueva York el 11 de septiembre de 2001! Pero, aunque cueste creerlo, todo fue un brillante montaje escénico llevado a cabo por las fuerzas militares especiales (y la C.I.A.) al servicio de las élites financieras mundiales que gobiernan el mundo en la sombra. Muy pocos saben que el Ejército de los Estados Unidos poseen desde hace años una muy avanzada tecnología holográfica aportada por ciertos seres "galácticos" con los que colaboran y que les permite hacer proyecciones holográficas en 3D casi perfectas. Dentro de poco esta misma avanzada tecnología holográfica será utilizada, por los mismos individuos, para hacer creer a la Humanidad que han llegado enormes naves espaciales alienígenas a la Tierra y que permanecen en órbita con la intención de invadir nuestro mundo. ¡El pánico y caos mundial será tremendo!
M. Z.
Abajo, imagen casi difuminada de uno de los supuestos aviones UNOS INSTANTES ANTES de impactar contra uno de los edificios. Hay zonas del avión que no se perciben claramente. Por lo demás, en ninguna de las numerosas filmaciones que existen de los supuestos aviones impactando contra los edificios, en ninguna se aprecian las luces estroboscópicas que poseen todos los aviones del mundo y que se encuentran en las puntas de las alas y en las colas de los aviones, aunque éste es el menor de todos los detalles que avalan que los supuestos aviones no eran más que proyecciones holográficas casi perfectas.
Para leer más: LA PRUEBA DE QUE NINGÚN AVIÓN REAL SE ESTRELLÓ EL 9/11
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