Los investigadores creen que la vacuna terapéutica ( llamada ImMucin ) que en lugar de atacar las células cancerosas se concentra en optimizar el poder del sistema inmunológico, podría hacer frente a cánceres de próstata, páncreas, ovario, intestino y mamas con mejores posibilidades que los más acreditados medicamentos existentes actualmente en el mercado ( incluída la herceptina ).
Laboratorios Biotheraputics Vaxil y la Universidad de Tel Aviv se han centrado en una proteína llamada MUC1 que se produce en mucho mayor cantidad en las células cancerosas que en las sanas y la vacuna "enseña" al sistema inmunológico a reconocerla y dirigir contra ella todo su arsenal defensivo.
Sin embargo, aún restan años de ensayos a gran escala en humanos antes de que la droga se considere segura y eficaz para su uso generalizado en hospitales, estimándose que podría estar a la venta alrededor del 2017.