Compartimos aquí una muy interesante enseñanza, transmitida por un Gran ser de Luz, y que conocemos como María Magdalena, o también, como era conocida hace 2.000 años: Miryam del pueblo de Magdala...
SEXUALIDAD y EVOLUCIÓN
Hoy, amada hermana de luz, proseguiremos con el tema de enseñanza que nos ocupa y nos place, ya que fue interrumpido por una intensa experiencia carnal que tu ser sabiamente debía vivir. El accidente que te aconteció hace dos meses, además de muchas razones que tenía tu alma para crearlo, procesarlo y trascenderlo, te ha servido en gran manera para emplear y constatar, una vez más, tu gran energía kundalini, para educarla y comprobarla a nivel auto-regenerativo, pues has podido constatar la espectacular rehabilitación que han realizado tus huesos y tu piel.
También tu capacidad lumínica se ha regenerado mucho, no lo dudes hermana, pues nada sucede por separado. Necesitabas un cambio de frecuencias, una activación y una actualización de tu gran campo lumínico, como les pasa a muchos seres humanos en estos tiempos.
En el anterior texto sobre sexualidad y la salud te comuniqué que el paquete o núcleo de fuerza vital Kundalini no se experimenta tan solo en el terreno de la sexualidad sino en el de la creación de ideas, circunstancias y hechos, y también en el terreno de la regeneración constante de vuestros procesos de salud.
Este fenómeno de gran regeneración, tanto celular como energética, no es nada más que pura creatividad, pura capacidad de sanar y de crear nuevas células y circuitos, los necesarios para cada etapa evolutiva.
Todos los seres humanos están ahora viviendo un intenso proceso de mutación celular, genética, etérica o energética, y por supuesto también de mutación y transformación psíquica, lo que significa un intenso ‘cambio’ de creencias, conceptos y memorias.
Si no se regenera ahora la raza humana, simplemente degenerará, como tantas civilizaciones se han corrompido. Vuestra fuerza Kundalini, amados caminantes y exploradores, juega un papel extremadamente importante en este gran proceso actual de mutación, de transformación fundamental y de evolución anímica.
Yo ahora estoy haciendo un servicio de información y saneamiento en esta materia debido a mi larga experiencia con ella, la cual me fue otorgada al compartir intensamente un pequeño trozo de mi vida con Jeshua, mi amado.
La salud de la psique humana depende mucho de cómo hacéis funcionar cada uno ese potencial creador y de cómo distribuís y empleáis la fuerza Kundalini. Debéis saber que no todos los seres tienen la misma calidad y cantidad de potencial. Con un ejemplo simple de vuestra época lo entenderéis mejor; no puede hacer lo mismo el motor de un coche potente y rápido, que el simple motor de un coche sencillo solo para pasear o cargar.
Los dos vehículos sirven para movilizarse y en el fondo hacen lo mismo (todos poseéis la fuerza Kundalini) pero uno tiene un potencial de alto voltaje y una alta calidad de componentes, y el otro coche (o ser humano) tiene un menor voltaje y potencia, o no puede hacer lo mismo, se estropea antes o no te lleva tan lejos. Cada uno trabaja partiendo del voltaje y potencial que posee en este momento, el cual puede y debe ampliarse de vida en vida.
Para completar la descripción de esa gran fuerza creadora, debo aclarar que la Kundalini no es de la misma naturaleza que esa energía llamada chi o fuerza eléctrica que circula por vuestros canales, meridianos, nadis y chakras. Esa energía vital y etérica de uso constante y cotidiano no es la fuerza Kundalini, pues ésta representa como el gran depósito o reserva que tiene el cuerpo, para usarla cuando la energía chi está muy agotada y se necesita más potencial.
Solo la gran fuerza Kundalini regenera la fuerza cotidiana del chi, de naturaleza eléctrica, o sea, es la Kundalini quien activa el chi o lo que vosotros llamáis ‘vitalidad’. La vitalidad procede del buen uso de la Kundalini y de su ‘calidad’ adquirida hasta este momento. Cuando me refiero a la calidad quiero decir que ese potencial haya sido bien usado, trabajado, ampliado o almacenado en otras existencias anteriores.
Dicho de un modo más comprensible: cada uno, del mismo modo que tenéis un alma solar distinta y un tipo de radiación según vuestra evolución y sabiduría, también venís a esta vida con un tipo de paquete Kundilini distinto, con un potencial determinado, mayor o menor, más luminoso o menos, más actualizado o menos. Cuando te decía que educar vuestra primordial fuerza Kundalini es un verdadero arte, tan solo quería expresar que es una clara cuestión de sensibilidad, respeto, observación, o de ‘capacidad de búsqueda de la armonía’; según sea ese impulso en cada uno, la volundad de evolucionar, eso es lo que os llevará a educar y ampliar más ese gran don divino.
Dios puso una porción de él mismo en cada uno, nuestra chispa divina, la llama trina, pero a la vez cuando un alma se encarna en la Tierra, Dios o la Fuente nos da ese preciado regalo, la fuerza Kundalini, como el potencial para crear, para crear nuestra vida a cada momento. Ese gran presente de Dios, como una semilla, lo podemos mimar, regar y hacer crecer… o bien lo podemos despreciar, ignorar o dejar secar.
Ahora debemos entrar en el terreno del Amor, el amor trascendente, que es como el viento que hace mover vuestras velas y os permite navegar vuestras vidas. Cuando los seres de todos los tiempos y lugares nos amamos, compartimos nuestros campos energéticos; es decir, compartimos tanto nuestros cuerpos etéricos como los cuerpos densos; por eso es tan importante la sexualidad y la consideramos sagrada.
Naturalmente, al unir y cruzar nuestros cuerpos, nuestras almas también se interpenetran y se intercambian nuestros códigos de luz; tú recoges los códigos de tu pareja, y él recibe los tuyos, incluyendo las memorias kármicas. Mezclar karmas puede ser una fuente de conflicto y a veces de ‘involución’; esa es una de las razones por las que en ocasiones se escoge el celibato, consciente o inconscientemente. Jamás debéis ver un acto sexual como algo anodino sino como pura magia, como un proceso alquímico de alto intercambio de elementos constituyentes.
Hoy es importante que sepáis o recordéis que cada individuo posee una envoltura etérica llamada antiguamente KA, un campo de fuerza vital de naturaleza magnética y eléctrica, yin y yang, femenina y masculina a la vez, que es como un aura, una aureola envolvente o una especie de ‘doble’ luminoso.
No es nuestro espíritu, que es como una estrella solar o motor interior, sino que el KA es un campo protector que envuelve a cada espíritu y posibilita que el fuego interior crezca y no se apague. Es decir, la envoltura Ka o doble etérico, es absolutamente necesaria para poder evolucionar, mantener vivo el fuego interno y ampliar su radiación; es como el ‘alimento’ de nuestro espíritu y el gran protector de la luz interior; esa es su función, preservar la llama trina.
Cuando sintáis que alguien está muy protegido, como si tuviera un gran ángel de la guarda, lo que estáis percibiendo es su Ka, su doble envoltura etérica, una radiación a veces muy amplia y activa. Para realizar ese gran proceso de ascensión y elevación de nuestra conciencia, que absolutamente todos los seres realizamos, tanto los que son humanos como los que lo somos, muy a menudo necesitamos ayudas y estímulos.
Cuando nos relacionamos, socialmente o en intimidad, recibimos estímulos de evolución, o todo lo contrario. Hay personas que os dan energía y otras que os la sacan, hay gente afin y armónica con nuestra alma, y otras con las que no empatizamos ni tampoco nos impulsan a evolucionar. Eso es un hecho en todas las épocas y procesos evolutivos.
En el cuerpo Ka existen vías, canales y circuitos de fluidos, que pueden ser estimulados o abiertos. Todos los yogis y las yoguinis realizaban y realizan el amor sagrado con la única intención de estimular y activar el doble etérico de su pareja, para amplificar su Ka mutuamente, para activar su luz. Individualmente también uno mismo puede activar su Ka, pero es mucho más fácil y efectivo hacerlo entre parejas de almas que se aman y se magnetizan mutuamente. Existen técnicas específicas para activar el doble etérico de forma individual.
Mi amado y yo, en los pocos años que estuvimos juntos, experimentamos ese fenómeno continuamente, puesto que ésta fue nuestra voluntad y misión; pero también lo pudimos hacer porque los dos fuimos previamente educados en la alquimia de Orus y la escuela sexual del Culto de Isis, por tanto conocíamos bien las técnicas y procesos alquímicos del amor.
Ese conocimiento y entrenamiento álmico lo recibimos mucho antes de conocernos, cuando estudiamos en las escasas escuelas y centros espirituales especiales de aquella época, a los que pocos accedían puesto que representaba recibir y trabajar con conocimientos secretos y herméticos respecto al poder de la Luz, algo que no interesa al poder de la oscuridad o ignorancia. Cuando el doble etérico o cuerpo Ka lo alteramos conscientemente, cuando aprendemos a activarlo mediante la sagrada sexualidad compartida, es decir, cuando se mueve y cambia esa envoltura lumínica, entonces esa capa etérica se refuerza, se vuelve más corpórea su energía, adquiere una mayor fuerza lumínica.
Durante el proceso, los siete sellos del KA, núcleos principales o chakras, se abren como grandes portales, se amplifican hacia exploraciones y potencialidades humanas mucho más intensas, más sutiles y naturalmente más influyentes alrededor puesto que la luz que emanamos entonces también se contagia.
Cuando eso ocurre, cuando activamos el Ka, se incrementa el campo magnético de uno, y se hiper-activa su voluntad de crear y de manifestar cualquier cosa con mayor rapidez, facilidad y luminosidad. En Joshua, la carga luminosa de su gran envoltura etérica es lo que le permitía realizar milagros y transmutar la materia densa.
Cuando tenemos el KA activo y lleno, nuestra salud, la auto-regeneración y la capacidad de creatividad es muy alta. Ese magnetismo amplificado naturalmente es una gran clave también para acelerar o activar la evolución y la ascensión a otros planos más sutiles. A veces es un proceso de muchas vidas activar nuestro Ka, ese doble etérico que nuestra alma hereda y se lleva de vida en vida.
Mi amado, durante los dos años anteriores a su gran desenlace, necesitó una gran ayuda por mi parte para activar enormemente su KA, con el fin de realizar su misión y su gran proceso consciente de desencarnación, y el consecuente mensaje que debía dar a la humanidad.
Durante las noches que nos encontrábamos y expresábamos nuestro amor sagrado, los dos éramos conscientes de la gran energía que estábamos moviendo, de la activación de nuestros dobles etéricos y circuitos de luz a cada instante. No hace falta decir el gran servicio que mi amado hizo conmigo también, al activar mi cuerpo Ka, y lo mucho que activó mi evolución en aquellos dos únicos años de relación intensa.
El amor trascendente entre una pareja de almas, más allá de sus cuerpos y sus códigos personalistas, es la gran vía de realización espiritual, el único camino pendiente, puesto que la sagrada sexualidad es el secreto de la evolución, en todas las versiones y concepciones de la palabra ‘evolución’.
Conocer las técnicas y manejos de la energía Kundalini y los mecanismos sagrados de la creatividad, es algo que se puede aprender, aunque hoy en día no haya tampoco escuelas abiertas a esas prácticas en la profundidad y coherencia que le corresponde. Se basan mayormente en conseguir la activación y la ondulación de los canales Ida y Pingala a través de nuestra columna, de la elevación de las fuerzas polares yang y yin, hasta conseguir su fusión y completitud en cada uno de los sellos del cuerpo etérico, es decir, hasta adquirir la plenitud lumínica de cada chakra.
En especial, esta ondulación ascendente se fusionará finalmente en vuestra cabeza, el cáliz, sintiendo el gozo de la Unidad, es decir, de la fuerza de Dios en vuestra experiencia terrena. A eso muchos yogis y yoguinis lo llaman el éxtasis de la Iluminación. Esa práctica sexual sagrada naturalmente activa el Ka, vuestro doble etérico lumínico, inteligente y amoroso, proporcionando en vuestra vida muchísimo más potencial de creación y acción, un voltaje o radiación muchísimo más brillante, y sobretodo, más ‘inmune’ a los densos procesos egoicos y orgánicos.
No todas las parejas están dispuestas a realizar este incremento de su envoltura protectora de luz, ni creen que haya un gozo aún mayor que el del orgasmo físico. Sin embargo, al practicar la sexualidad y el amor trascendente, la plenitud de amor que se alcanza y el estado de paz en la pureza, es una experiencia indescriptible y plena.
No dudéis en ningún momento que el estado de Amor Pleno y trascendente es algo a lo que ‘todos’ los seres humanos van a llegar experimentar en algún momento de su proceso evolutivo, y que alcanzarán en algún escalón de esa larga escalera de ascensión de planos y niveles vibratorios, por la que todas las almas transitamos. Eso es ley de vida.
Hoy os proporciono esa información con el único propósito de impulsar la búsqueda de ese arte alquímico del Amor, para que conozcáis, respetéis y activéis vuestra fuerza Kundalini, y para facilitar el camino de ‘experimentar’ ese potencial divino que cada uno posee en su interior. Yo estoy en ti, hermana del alma, y tú estás en mi.
Miryam de Magdala
canalizado por Marta Povo
